Todos los días en todos los países del mundo, con distintos entornos culturales, sociales, educativos y religiosos, muchos niños sufren y presencian actos de violencia que nunca son justificables y siempre pueden evitarse.
La promoción, protección y defensa de los niños y adolescentes requiere acciones e intervenciones oportunas, adecuadas y mancomunadas de la familia, de la comunidad y del Estado.
En general, las acciones hasta ahora promovidas han sido las de desarrollar en los niños habilidades psicosociales para su propio cuidado, lo que es necesario pero no totalmente justo. En realidad la responsabilidad del cuidado de los niños corresponde a los adultos.
Este curso se propone formar a los participantes desde una perspectiva integral, a fin de que puedan orientar su intervención desde una mirada humanizada y humanizante, capaz de realizar un aporte superador, tanto en materia de políticas proactivas que promuevan ambientes seguros y sanos, como en la prevención de la violencia y contención a la víctima.
Profundizar en la complejidad actual de la formación permanente en torno a la responsabilidad de Crear una Cultura de la promoción del cuidado y prevención del abuso, ofreciendo elementos teóricos, prácticos y vivenciales para lograrlo.
Profesionales de áreas de: Ciencias jurídicas, Trabajo social, Psicología, Psicopedagogía, Sociología, Antropología, Educación, Comunicaciones sociales y otros, interesados en la temática.
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